Más allá de ser usado para endulzar o dar consistencia a ciertas preparaciones, el azúcar puede ser tu aliado en el hogar. Tenemos a disposición diferentes tipos y a su vez, aplicaciones. Te sorprenderás lo que puede ayudarte este ingrediente que seguro tendrás en la cocina en varios aspectos de tu vida.

¿Qué tipos de azúcar existen?

Tal vez sólo hayas visto el que se comercializa más frecuentemente que es el azúcar refinado, unos granulitos blancos que sirven para el té, el café, un pastel, etc. Sin embargo, hay otros tipos, entre ellos podemos destacar:

• Azúcar de mesa o corriente: como se decía anteriormente, es el más usado, el que todos conocemos, el granito es de tamaño pequeño a mediano.


• Azúcar extra fino: no se conoce en muchos países, como ser en España, pero hay varias recetas anglosajonas de dulces y postres que lo llevan como ingrediente. Es de grano muy pequeño.


• Azúcar glass: es el mismo azúcar “común” que ha sido triturado hasta convertirlo en un polvillo. Se utiliza para espolvorear por encima de los pasteles o elaboraciones de dulces para que no se perciba el granulado.

• Azúcar cande o perlado: es redondo de un tamaño más grande al azúcar tradicional. Es popular en los países del Norte y Centro de Europa. Se puede encontrar en bollería alemana y escandinava y también en los conocidos “gofres belgas”.


• Azúcar en cristales: es el más grande que se consigue en las tiendas y se utiliza más por decoración o motivos estéticos, ya sea para endulzar té o café. Casi siempre es de forma cuadrada no uniforme y se toma con una pequeña pinza. No se disuelve tan fácilmente como el granulado.


• Azúcar invertido: muchos dicen que no está en la misma categoría que los demás azúcares, pero vale la pena nombrarlo. No se compone exclusivamente de la sacarosa, sino que se mezcla con otros como el sirope. Se obtiene al calentar y se usa en la dulcería industrial porque permite mantener las piezas tiernas por más tiempo.

“Es como boticario sin azúcar”

Ese era un dicho popular de antaño y se debe a que los boticarios utilizaban el azúcar para curar varias enfermedades y dolencias, una vez que lo descubrieron o se dieron cuenta de sus ventajas. Algunos decían que servía para tratar los problemas del sistema respiratorio, otros que era ideal para las heridas. Lo que si, casi todos coincidían en que el azúcar tiene facultades médicas y que cura.

Si se lo mezcla con una gran cantidad de agua produce jarabes, que luego se le añaden otras hierbas esenciales y tratan gripes, resfríos, catarros, etc. Si se lo mezcla con alcohol fuerte, como el aguardiente, también sirve para rebajar la fiebre.

Los boticarios lo tenían siempre a mano porque no se echaba a perder en seguida. Además, era habitual que estas personas trabajaran en el mismo terreno que su hogar, y siempre podían recurrir a la despensa de su esposa para conseguir un poco de este endulzante.

Usos del azúcar que te sorprenderán

Calmar a los bebés

Si tu niño tiene problemas para dormir o le duelen las extremidades luego de recibir alguna de las varias vacunas que recibe en sus primeros meses de vida, puedes darle una solución hecha con una parte de azúcar por cuatro de agua antes de su inmunización.

Tratar heridas

Como se decía antes, el azúcar sirve para matar las bacterias que causan dolor en las heridas, cortaduras, o úlceras. Sólo tienes que rociar un poco por encima y dejar que actúe.

Calmar la lengua quemada

Si bebiendo una infusión, una café o una sopa, o bien probando cómo te ha quedado la salsa te quemas la lengua, chupa un cubito de azúcar o bien vierte unos granitos.

Reducir el picante de los alimentos

Si estás preparando un condimento o una salsa y te has pasado de picante, no dudes en colocar una cucharadita de azúcar. También sirve para cuando una preparación con tomate caliente queda muy ácida.

Exfoliar la piel

Mezclando azúcar con aceite de oliva o de almendras puedes crear un excelente exfoliante para eliminar las células muertas de todo el cuerpo.

Extender el labial

Uno de los problemas de las mujeres es que su lápiz labial no se mantiene durante todas las horas que ella quisiera. Por beber, fumar, pasarse la punta de la lengua o saludar a alguien ya desaparece. Para que te dure un poco más rociá un poco de azúcar sobre tus labios después de pintarlos, deja unos instantes y luego lámelo de manera uniforme.

Limpiar las manos percudidas

Esto es bueno para los hombres que trabajan con grasa o aceites (los mecánicos por ejemplo), o después de usar pinturas. Sólo hay que añadir un poco de azúcar y lavar con el jabón de siempre para que se convierta en un abrasivo.

Mejorar el aspecto del jardín

Mezcla tres cucharadas de azúcar con dos de vinagre y un cuarto de agua tibia. Aplica en la tierra alrededor de las plantas. El azúcar alimentará los tallos y el vinagre evitará que se desarrollen las bacterias.

Limpiar la cafetera

Vierte una cuarta taza de azúcar en el molino y deja unos 3 minutos como si estuvieras preparando café. Limpia con abundante agua.

Quitar las manchas de grasa

Si tu prenda preferida, el mantel o las cortinas se manchan con grasa, prepara una pasta con azúcar y agua y aplica directamente. Deja que repose una hora por lo menos y luego lava como siempre.

Mantener las galletas o los pasteles frescos

Colócalos en un recipiente sellado junto a varios cubitos de azúcar para que duren más tiempo. Lo mismo puede aplicarse al queso para rallar, para que no endurezca.

Imágenes cortesía de Uwe Hermann, David Eccles, Betsy Weber, Jody Mcintyre, goodmami, Javcon 117, Joel Kramer.

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